Segundo verano sin geosminas en Río de Janeiro

Brasil, país conocido por sus exuberantes selvas tropicales, se enfrenta desde hace unos años a graves problemas hídricos. Uno de los problemas más importantes a los que se enfrenta el país es el crecimiento excesivo de algas en sus masas de agua. Las algas son plantas acuáticas que pueden causar problemas medioambientales y sanitarios cuando no se controla su crecimiento. En este artículo, discutiremos las causas y los efectos del crecimiento excesivo de algas en Brasil, así como algunas posibles soluciones para mitigar el problema, como el caso de la colaboración entre CEDAE y LG Sonic, garantizando un segundo verano libre de geosmina en Río de Janeiro.

Una de las principales causas del crecimiento excesivo de algas en Brasil es la contaminación de sus masas de agua. Los residuos industriales y los vertidos agrícolas que contienen fósforo y nitrógeno son los principales responsables del crecimiento excesivo de algas. Estos nutrientes hacen que las algas se multipliquen a un ritmo alarmante, dando lugar a floraciones que pueden cubrir masas de agua enteras.

Otro factor que contribuye al crecimiento excesivo de algas es el aumento de las temperaturas debido al cambio climático. Las algas prosperan en aguas cálidas, y el aumento de las temperaturas ha provocado un incremento de su tasa de crecimiento. Además, las frecuentes sequías en Brasil han provocado un descenso del nivel de las aguas, lo que puede concentrar los nutrientes en el agua y aumentar aún más la proliferación de algas.

El crecimiento excesivo de algas puede tener graves consecuencias medioambientales y sanitarias. La proliferación de algas puede agotar el oxígeno del agua y provocar la muerte de peces y otros animales acuáticos. Las algas también pueden liberar toxinas perjudiciales para las personas y los animales que entran en contacto con el agua o comen pescado contaminado.

Además de los efectos medioambientales y sanitarios, el crecimiento excesivo de algas también puede afectar a la economía de Brasil. La industria turística del país, que depende en gran medida de sus hermosas playas y masas de agua, podría verse afectada por la proliferación de algas antiestéticas y potencialmente peligrosas. El crecimiento excesivo de algas también puede afectar a la industria pesquera, que es una importante fuente de sustento para muchas personas en Brasil.

Una solución al crecimiento excesivo de algas es reducir la contaminación de las masas de agua de Brasil. Esto puede lograrse aplicando una normativa más estricta a las industrias y explotaciones agrícolas que producen residuos y escorrentías. Además, promover el uso de prácticas agrícolas sostenibles que reduzcan la cantidad de fósforo y nitrógeno de escorrentía también puede ayudar a mitigar el problema.

Otra solución es aumentar la vigilancia y la detección precoz de la proliferación de algas. La detección precoz puede ayudar a prevenir la propagación de las algas y reducir las repercusiones medioambientales y sanitarias. Esto puede lograrse mediante la vigilancia periódica de las masas de agua a través de las boyas ultrasónicas de LG Sonic.

La CEDAE, empresa responsable del tratamiento del agua en el área metropolitana de Río de Janeiro, ha invertido más de 80 millones de reales para combatir la proliferación de algas y garantizar la calidad del agua distribuida a la población. La empresa cuenta con un equipo multidisciplinar que utiliza equipos de última generación para controlar y tratar el agua.

La primera medida adoptada por la empresa fue instalar bombas que transportan 3.000 litros de agua por segundo desde el río hasta Lagoa Grande. Esto reduce la temperatura del agua, lo que frena la proliferación de la geosmina.

Otra medida que se implementó durante el verano de 2022 fue la instalación de ocho LG Sonic MPC-Buoys, que emiten ondas ultrasónicas de baja potencia que mantienen las algas bajo la superficie, impidiendo su proliferación. Daniel Okumura, Director de Saneamiento y Operación Mayor de la empresa, explica que: “A través de una plataforma en línea, podemos ver datos que indican las condiciones del agua en función de parámetros predefinidos, como los niveles de pH, clorofila y turbidez, entre otros. Con esto, nuestros operadores pueden monitorear toda la información recolectada, y recibir alertas en caso de posibles cambios en alguno de los estándares. Los recursos remotos también permiten modificar las frecuencias de los ultrasonidos en función de las características del agua”.

El crecimiento excesivo de algas en las masas de agua brasileñas es un problema importante que requiere atención inmediata. Las causas del crecimiento excesivo de algas son complejas y multifacéticas, pero existen soluciones para mitigar el problema. El enfoque multidisciplinar y de alta tecnología del CEDAE y LG Sonic para el tratamiento del agua es un gran ejemplo de cómo la inversión en tecnología puede mejorar los servicios públicos y proporcionar beneficios económicos. Al abordar la raíz del problema, y no sólo las consecuencias, la empresa ha podido suministrar agua limpia y segura a los habitantes de Río de Janeiro, ahorrando al mismo tiempo dinero en soluciones temporales. Brasil puede empezar a abordar el problema del crecimiento excesivo de algas y proteger su medio ambiente, su economía y sus ciudadanos. Es esencial que el gobierno, las industrias y los ciudadanos de Brasil trabajen juntos para encontrar soluciones a este problema crítico.